Últimamente, hemos visto a través de redes sociales, la existencia de una agresiva y muy entretenida viralización de memes y gráficos con temas políticos. En algunos casos han funcionado tan exitosamente a partir de ideas propias de la cultura contemporánea o temas muy  discutidos en la vida cotidiana con personajes o hechos de la actualidad loretana o iquiteña.

Definitivamente, existe una relación directa entre lo que la población percibe como ausencia de espacios donde pueda expresar su malestar y la proliferación de estos mensajes directos, sin intermediarios, que se cuelgan en internet sin mayor que problema que la conexión.

Lo interesante es que, a pesar del servicio deficiente, quienes pueden acceder al servicio han encontrado también en el Facebook (y, en menor medida, también en Twitter o Youtube) una vía para protestar o para satirizar a los políticos y sus errores u omisiones. A pesar de que en Iquitos el internet es lento y no existe una significativa masa que maneja las redes sociales; pero pese a ello la pequeña minoría ha logrado satirizar a las autoridades con mucha efectividad.

Según todos los diagnósticos, los usuarios de redes, pese a ser un número no necesariamente masivo, concentra un porcentaje muy significativo de prosumidores (consumidores y a la vez productores de contenidos) con llegada e influencia en diversos sectores, llámese político, económico, social, cultural y, mucho más, periodísticos. Entonces, cuando un tema se pone en debate o es trending topic (lo más comentado en Twitter) en realidad, no solo se agota allí, sino pasa, por inercia, también a medios de comunicación tradicionales.

Las redes sociales pueden, además, sustituir incluso a los medios de comunicación en la transmisión inmediata de un mensaje, cualquiera sea este. Esto permite que un periodista o un comunicador limeño o ayacuchano o taiwanés se enteren de las denuncias o de las críticas a una gestión edil o a un gobierno regional más rápido a través de sus redes sociales que a través de los medios de comunicación tradicionales. Pero, lo más importante, un iquiteño conectado a redes puede enterarse más rápido de las noticias a través de sus redes sociales que los medios usuales de prensa escrita, radio o TV.

Una personaje político es consciente que las la críticas pueden llegar desde cualquier lado o de cualquier modo. Un comentario insidioso en Facebook o en el post de un blog  no difiere mucho, en ese aspecto, de una pifia, una agresión verbal o una carta durísima en un diario.  En las redes sociales su problema será el del espacio, su capacidad para manejar un territorio de amplitud y compleja naturaleza. Ante ello, es importante, saber cómo actuar.

Estamos entrando a una etapa en que las campañas también se van a trasladar al mundo virtual.  Los memes, que son una forma simple y efectivísima de lanzar un mensaje a través de una frase o una imagen, cumplen un papel crucial. Viralizan una idea, la hacen parte de un sistema de comunicación permanente (nada más constante que los flujos de información 2.0) sin pasar por una censura previa.

Las autoridades y en general todos los políticos loretanos tienen una estrategia muy limitada en cuanto a comunicar a través de redes sociales, sobre todo a interactuar con sus audiencias.  Queda claro el mensaje: ahora su trabajo de comunicacion en este caso institucional debe tener en cuenta las redes sociales.

Allí es cuando la presencia de los comunicadores y difusores y medios de comunicación se hace vital.  El mundo virtual no solo sirve para venganzas anónimas que no son tan anónimas (en internet todo deja huella), sino para aprender que esto también puede ser una gran oportunidad para captar espacios y simpatías.

Ninguna elección se gana solo con una estrategia virtual. Sin duda, la campaña también está en las calles y sobre todo en un sector considerable de la población rural que ni siquiera tiene un smartphone. Sin embargo, una correcta y dinámica estrategia de redes va a servir para que algunos electores capten el mensaje de su candidato en comunicación directa, con mensajes concretos, oficiales  que  sistematicen sus ideas y las logren difundir con éxito. En otras palabras,  van a  llegar con mayor efectividad y contundencia a los electores que pueden tener algún nivel de influencia fuera del mundo virtual. A tenerlo en cuenta.